Amor Incondicional o apego codependiente
Recientemente está prodigándose mucho una nueva tipología dentro de los vínculos de Almas denominado Llamas Gemelas.
La primera referencia a este término –mínima y sin contexto- la encontramos en Google a partir del 2000 dentro de un libro atribuido a Sant Germain. A partir de ahí saltamos al 2004 dónde aparece dentro de un contexto de dualidad energética (energía masculina y femenina, Ying y Yang…) con o sin encuentro físico y fuera de un contexto romántico. Además, profundizando en la descripción, se asemeja en realidad a un vínculo entre Almas Gemelas y no una Llama Gemela con las connotaciones actuales. Es ya en torno al 2018 que empieza a crearse toda una literatura acerca de ellas.
¿Por qué trato de diferenciar y buscar la procedencia del término? La espiritualidad es tan antigua como el hombre. Y algo tan “nuevo” a mi me huele a invento. Sinceramente.
Y si fuese algo positivo, impulsador y armonioso, sería perfecto. Pero resulta que es todo lo contrario. Es altamente contradictoria, enfermiza y peligrosa la información que podemos encontrar actualmente bajo este nombre, pues las características de relación que describen se parecen más a una relación kármica que deberíamos sanar y dejar atrás, que una relación de amor sano en la que debamos permanecer o incluso “perseguir”.
Ya me ha llegado a consulta alguna mujer que cree haber encontrado a su Llama Gemela, absolutamente desestabilizada emocionalmente porque lo que está viviendo en realidad es una relación tóxica con todas las estrategias de un abusador emocional como son el ghosting, el gaslighting, el refuerzo intermitente, el descarte, la triangulación, la devaluación, etc…
Y es que, en este relato de las llamas gemelas, aparecen mensajes que solo favorecen el apego y la codependencia, en su gran mayoría en sintonía con la naturaleza, el prototipo y los apegos culturales que resuenan en mayor medida con las mujeres, que en esta locura espiritual pasan a llamarse Divinas Femeninas, desvirtuando un término muy hermoso en su profundidad real.
Dicen que es un alma divida en dos desde el origen, que están destinados a la Unión Sagrada, -o armoniosa como dicen en otros foros- pero lo que están viviendo está absolutamente en la antípodas de la armonía ¿y sabéis qué? Resulta que es culpa de la “divina femenina” que no está haciendo convenientemente su “trabajo espiritual”, y según lo vaya haciendo el “divino masculino” se volverá más bueno que un príncipe Disney “despertando” a la conexión y corriendo hacia ella sobre un corcel blanco casi casi… Tal vez no hoy, ni mañana, ni el mes que viene… igual hasta pasan años… Pero tranquilas, porque para ello están los Couch –a veces en “unión armoniosa” y otra ni siquiera…- que te ayudarán a lograrlo con sus cursos y sesiones privadas.
Tal vez no haya nadie en el mundo más abierto que yo a las terapias fuera de lo convencional, sobre todo si nos impulsan en nuestro crecimiento, y siempre digo que una terapia se cruza en nuestra vida por resonancia. Pero de siempre han existido personas dispuestas a vivir a costa del dolor de otros, y en este mundo de las terapias no es diferente.
Siempre digo que hay dos síntomas muy claros para diferenciar un buen terapeuta de la especialidad que sea, convencional o no: que me ayude a crecer y sentirme bien de forma gradual y en positivo, y sobre todo, que no favorezca en una dependencia de sus servicios.
Solo hace falta aproximarse a todo lo que envuelve hoy día este relato seudo espiritual–romantizado con algo de mente crítica para ver que solo alimenta el ego y la herida … y encima lo disfrazan de despertar espiritual.
Pero está calando peligrosamente. Y me temo que solo va a servir para que perduren vínculos de abuso muy dañinos. Y sí, tal vez sea posible que finalmente impulse un crecimiento personal, pero no a través del “camino de llamas gemelas” sino por las heridas creadas a través de él, que un día u otro traerá el desplome emocional.
Cuando se habla de la “conexión” se describen unas primeras impresiones muy intensas y no niego que pudieran darse. Pero lo siguiente son dinámicas realmente tóxicas.
A partir de aquí, como psicoterapeuta te lanzo esta pregunta que podríamos hacernos:
¿Cómo diferenciar un vínculo sano –y espiritual- de uno que no lo es?.
Muy fácil. Sólo observa cómo te sientes. Si estás bien, equilibrada, lúcida, valorada, expandida y fuerte, lo es.-aunque vivas alguna diferencias con esa otra persona. Sin embargo, si te sientes desequilibrada, confusa, devaluada, bloqueada y débil, no lo es.
Y te recomiendo que en ningún caso favorezcas la continuación de un vínculo que te hace sentir así. En cambio te insto a que busques lo que te hizo entrar ahí, concretamente tus carencias y heridas, para poder sustituirlas por el poder que sin duda habita en ti y salir definitivamente de algo tan devastador.
Y no dudes en buscar ayuda terapéutica para hacerlo si observas que sola o solo, te resulta demasiado difícil. Por último, te recomendamos descubrir que son las relaciones kármicas, las almas gemelas y las almas afines junto con la gran importancia que estas tienen en nuestra vida.
Espero que esta información te haya sido útil, ¡Nos vemos en la siguiente!